El gobierno local ha anunciado un recorte en el suministro de agua para las empresas ubicadas en el sur del estado, en respuesta a la crisis hídrica sin precedentes que afecta a Tamaulipas. Las principales ciudades impactadas son Tampico, Ciudad Madero y Altamira, donde los residentes han reportado dificultades crecientes para obtener agua, incluso con la distribución de pipas por parte del gobierno estatal.
La situación se ha agravado con la llegada del verano, que ha traído temperaturas superiores a los 45 grados centígrados. Esta problemática era previsible, ya que las autoridades tenían conocimiento de que los estados del norte, incluyendo Tamaulipas, llevan al menos cuatro años en condiciones de sequía.
Raúl Rodríguez, presidente del Consejo Consultivo del Agua, explicó a El Economista que el cambio climático ha exacerbado el problema, aumentando las temperaturas y reduciendo las lluvias. Estas condiciones han provocado la evaporación de las pocas aguas superficiales disponibles en presas, lagunas y arroyos.
Según el Monitor de Sequía de México (MSM) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al 31 de mayo de 2024, 42 de los 43 municipios de Tamaulipas presentan algún grado de sequía. Además, una de las principales cuencas que abastecen al sur de la entidad, la del Golfo Norte, presenta sequía excepcional en más del 40% de su área.
Ante este panorama, el gobierno ha decidido priorizar el uso del agua para la población, reduciendo el suministro a las empresas en un esfuerzo por mitigar los efectos de la crisis hídrica en la región.