En el último año, el sur de Brasil ha experimentado una serie de eventos climáticos extremos vinculados al fenómeno de El Niño, resultando en lluvias intensas que han causado inundaciones en la región.

Las terribles inundaciones en el sur de Brasil han resultado en la muerte de al menos 83 personas, con 103 más aún desaparecidas, según las autoridades de Defensa Civil, que informaron el domingo al mediodía.
El recuento actual incluye 276 heridos, 111 desaparecidos y más de 850,000 personas afectadas por el fenómeno natural.
Aproximadamente 134,000 personas se vieron obligadas a evacuar, mientras que 121,957 fueron desalojadas, con otras 19,368 alojadas en albergues. Según el último informe sobre daños en la infraestructura, alrededor de 261,000 áreas están sin servicio eléctrico y 854,000 hogares carecen de suministro de agua.
El número de fallecidos hasta ahora ha superado el registrado en septiembre de 2023, cuando un ciclón causó 54 muertes, según Agencia Brasil, convirtiendo este desastre climático en el peor en la historia del estado.